Una de las ceremonias más soñadas por todas las parejas de novios es casarse al aire libre. Y, no os vamos a mentir, a nosotras también nos encantan. La verdad es que este tipo de ceremonias son siempre muy especiales y le da un toque muy orgánico el hecho de celebrarlas en medio de la naturaleza. 

Así sea en un jardín, en un pequeño bosque, en una playa o en un acantilado, las ceremonias al aire libre son igualmente originales y, lo mejor de todo, nos permiten ponernos creativos con la decoración. No obstante, esto no puede nublarnos la necesidad de decorar una ceremonia nupcial al aire libre.

Decorar una ceremonia al aire libre

Hay que pensar que, en un recinto cerrado, siempre estaremos un poco limitados por el espacio y por la libertad que nos dén los propietarios; sin embargo, al aire libre es una opción en la que contamos con un abanico más grande de posibilidades. No deshechéis la idea de casaros al aire libre porque verdaderamente es una manera encantadora de contraer matrimonio que, además, encantará a los invitados. 

Para haceros un poco más sencilla la tarea de decorar una ceremonia nupcial al aire libre, en el día de hoy hemos querido traeros la primera parte de una serie de post donde os iremos contando nuestros mejores trucos. Así, el tema no os dará muchos dolores de cabeza y conseguiréis una decoración increíble.

En este post queremos centrarnos en daros ideas sobre ciertos puntos a tener en cuenta a la hora de decorar una ceremonia. Algunos consejos para que todo quede perfecto y, sobre todo, qué opciones tenemos para decorar la parte protagonista: el altar. 

Cuestiones previas

Lo primero de todo es tener claro que la decoración de la ceremonia es la que va a provocar que todas las miradas de los invitados se dirijan directamente al altar donde nos vayamos a casar.

Por este motivo, hay que echarle ganas y pensar de manera estratégica para lograr el mejor resultado. Para esto, es necesario que nos fijemos en algunos puntos que nos pueden dar las claves sobre qué línea llevar en la decoración de la ceremonia. 

El estilo de la boda

Uno de los primeros puntos para escoger la decoración es tener claro el estilo de boda que estamos representando: vintage, hippie, industrial, boho chic, rústica, con alguna temática concreta… Esto ya nos dará una idea de por dónde tirar y de cómo adaptar la decoración de la ceremonia a este estilo. 

Dónde, cómo y cuándo

Por otra parte, también es súper importante tener en cuenta algunos aspectos que se escapan un poco a nuestro control. Por ejemplo, lo primero sería tener en cuenta la época del año en la que nos vamos a casar. 

Puede ser esencial, por ejemplo, para no olvidarnos de colocar una buena sombra en verano; también nos puede ayudar evitando poner un altar muy ligero si nos casamos en otoño y que el viento nos juegue una mala pasada o si queremos una decoración floral que se pueda estropear con la lluvia. 

También es importante tener en cuenta a qué hora nos vamos a casar. Para bodas de día podemos optar por detalles de decoración con más color, llamativos y que no resten luz al ambiente. En cambio, si vamos a celebrar una ceremonia al atardecer o cuando ya se haya ido el sol, una buena idea para aportar luminosidad puede ser utilizar detalles en tonos blancos, dorados, plateados o crudos. 

Otro punto interesante es intentar no opacar la propia localización de la ceremonia: el mar de fondo, un bonito jardín alrededor o una puesta de sol bonita. Si hemos optado por casarnos al aire libre es porque también queremos que el entorno forme parte de esta situación tan especial. En este sentido, es importante no tapar las vistas del ambiente con la decoración o con elementos como sombrillas o arreglos florales.

Piensa un plan B

Igualmente, al tratarse de ceremonias al aire libre también es interesante contar con un plan B para poder celebrar la ceremonia. En este sentido, se puede bien pasar la ceremonia al interior, o bien contratar algún servicio con estructuras fijas a las que se le puedan añadir en el último momento alguna carpa o que cuenten con techos acristalados para proteger a los invitados y a la decoración en caso de lluvia.

La disposición del altar

Si hay un protagonista en la ceremonia al aire libre de una boda (además de los novios) ese es el altar. Podríamos decir que la decoración de una ceremonia nupcial parte siempre desde el altar, ya que es el elemento al que más atención van a prestar los invitados debido a la orientación que suelen tener los asientos. 

Dentro del altar, contamos con diferentes elementos que marcarán la diferencia, como el propio espacio donde se oficia la ceremonia, los asientos para los novios, la mesa nupcial o el lugar destinado al maestro de ceremonias. 

Delimita el lugar

Para delimitar el espacio en el que se celebra la ceremonia es importante escoger un elemento que funcione como hilo conductor. Normalmente, se hace uso de una pérgola, un cenador, un arco o una celosía, aunque se pueden encontrar todo tipo de backgrounds personalizados con composiciones geométricas, letras, luces de neón o semicírculos florales. 

Una vez hayamos escogido este elemento podremos decorarlo con flores, luces, velas, adornos de papel o cualquier otro accesorio de decoración que nos guste, como unas cortinas, una tela vaporosa o unas guirnaldas. Además, podemos adaptar este elemento al estilo de la boda variando el material con el que está fabricado (madera, aluminio, papel…).

Asientos para los novios

Los asientos para los novios son otra pieza fundamental. Deben expresar la personalidad de cada uno, al mismo tiempo que representan la unión de ambos, por lo que deben ser los asientos más especiales de toda la boda. 

Para decorarlos podemos utilizar desde fundas personalizadas para sillas, con nuestros nombres o con la fecha de la boda, hasta las clásicas flores, lazos o cualquier otro elemento decorativo que nos guste. 

Es necesario apuntar que, en este sentido, no tenemos por qué acudir directamente a las típicas sillas sencillas. Es nuestra boda y podremos utilizar aquellos asientos que mejor nos representen: un banco de madera, dos sillas pequeñas, un sofá para los novios, un par de taburetes, unos asientos de paja con mantas por encima… las posibilidades son infinitas y, realmente, en este caso lo único que nos puede limitar es nuestra imaginación (¡y el presupuesto!).

Maestro de ceremonias

Dependiendo del tipo de ceremonia que queráis incluir en vuestra boda, debéis adaptar de una forma u otra el espacio que dejáis para el maestro de ceremonias. Si buscáis una ceremonia religiosa tendréis que tener en cuenta, además de la decoración, las peticiones técnicas que os realice el sacerdote.

Si vais a escoger una ceremonia civil oficiada por algún cargo público, probablemente tendréis que preocuparos de conseguir un atril y un micrófono. Finalmente, también hay la opción de que oficie la boda algún amigo o familiar, por lo que también debéis consultar con ellos si necesitan algún equipamiento especial para su discurso. 

Sea como sea, podéis decorar tanto el micrófono como el atril o cualquier otro elemento que se necesite con luces, flores o lazos de tela. 

Mesa nupcial

La mesa nupcial es el lugar donde se llevan a cabo algunos rituales simbólicos o que se utiliza para dejar algunos documentos administrativos. Además, esta mesa puede servir de apoyo tanto para los novios como para los oficiantes de la ceremonia, así que es también un elemento a tener en cuenta en temas de decoración. 

En esta mesa nupcial tenemos total libertad para incluir todo tipo de decoraciones: velas, pequeñas luces, plantas y jarrones, guirnaldas, lazos, flores… todo en la línea decorativa de la boda, de manera que se vea un estilo unificado y coherente. 

Además, aquí también podemos incluir algún letrero con los nombres de los novios o la fecha del enlace, una frase de madera, algunas fotografías personales o los elementos necesarios para vuestro ritual como, por ejemplo, un ritual de arena. 

Este es el lugar en el que dispondremos todo lo necesario para el enlace, por lo que lo podemos personalizar al máximo para que nos represente al cien por cien. Podríamos incluso, incorporar a esta mesa una caja de madera, que se puede utilizar a modo de decoración o para hacer una dinámica que ahora está muy de moda: una cápsula del tiempo. 

La idea es que, dentro de esta caja se puedan incluir recuerdos por parte de los novios, sus familias y los demás invitados, así como una fecha grabada que indique en qué momento podrán abrirla de nuevo los novios y sorprenderse con todos los recuerdos del día de su boda. Normalmente, se suele poner la fecha en la que se celebrarían, por ejemplo, las bodas de plata. 

Hasta aquí nuestro primer post para daros ideas de cómo decorar una bonita ceremonia nupcial al aire libre, centrándonos sobre todo en la parte del altar. La semana que viene os traeremos la segunda entrega de esta temática, en la que hablaremos más sobre detalles de boda, con ideas increíbles para adornar las sillas o el camino hasta el altar, entre muchas otras sorpresas. ¡No os lo podéis perder!

Y vosotras, ¿ya habéis pensado en cómo sería la decoración de vuestros sueños para una ceremonia al aire libre? ¡Contádnoslo en los comentarios!