¿Qué sería una boda sin que al salir los novios recibieran una lluvia de arroz? Sin duda, esta es una de las tradiciones más ancestrales que se conocen con respecto a estas celebraciones. Aunque ir hasta la puerta cargando un saco de arroz para que todo el mundo coja un puñado no es que sea una buena idea. Tampoco intentar repartirlo justo minutos antes de que la pareja salga tras haberse dado el “Sí, quiero”. La solución es tener listas nuestras bolsitas de arroz para bodas, y así cada uno puede ir cogiendo la suya según sale de la ceremonia.
Las bolsitas de arroz para bodas que te ofrecemos son cómodas y prácticas. No tienes que pasarte una tarde entera rellenando a mano las bolsas y cerrándolas después, porque estas están listas para usar. Además, están personalizadas con el nombre de la pareja y la fecha del evento. Para que todo el mundo sepa dónde está, por si alguno de estos invitados despistados se pregunta quién se ha casado (risas).
Además, y pensando también en ellos, en la parte trasera hay una hoja de instrucciones de uso. Un simpático guiño que todos los invitados comentarán durante el lanzamiento del arroz. Y que además se pueden llevar como recuerdo para hacer su propio álbum de recortes de la boda, algo muy habitual, ya que todo el mundo quiere tener su propio registro del acontecimiento.
Las cantidad de arroz que hay en las bolsitas es suficiente para una bonita lluvia mientras la pareja entra en el coche. Ni sobrará ni se tendrá la sensación de que se ha acabado demasiado pronto. Aunque siempre hay algunos invitados a los que nadas les parece suficiente, pero en general todo el mundo habrá podido disfrutar de la ocasión.
Las bolsitas de arroz para bodas están compuestas por una bolsa de celofán resistente, una tira de cartulina impresa con personalización y diseños de gran colorido. Y arroz, por supuesto.
Si no sabías cómo ibas a repartir el arroz en la boda, esta idea es de lo más original. Las bolsitas personalizadas te ahorran el esfuerzo de estar rellenando una a una cada bolsa, mirando si todas son iguales y cerrándolas bien para que no haya accidentes. Nadie se quedará sin la oportunidad de participar en esta antigua tradición para dar la bienvenida a la nueva pareja. Es uno de los detalles de boda más icónicos de las bodas.
